El Golfo
Una de las muchas maravillas geológicas de Lanzarote es, sin duda, El Golfo, una laguna de color verde esmeralda situada en el fondo de un espectacular crater en la costa oeste de la isla.
Pasados Los Hervideros, a tres kilómetros de una costa constantemente golpeada por el mar, los acantilados se vuelven aún más espectaculares hasta convertirse, por el tremendo efecto del mar durante tantos siglos, en una inmensa ola petrificada a punto de romperse en el océano.
En el Golfo, la costa está formada por los restos de un cono volcánico, la mitad del cual se desplomó y desapareció bajo el mar. Hay un emocionante contraste entre la laguna que toma un extraño y brillante color verde, debido a la presencia en sus aguas de organismos microscópicos, y la asombrosa roca superior.
La laguna está separada del mar por una playa de arena negra sazonada de minúsculos granos de olivina, una brillante piedra semipreciosa de color verde. El resultado geológico y paisajístico de El Golfo es un tanto desconcertante. Hay tantas cosas para ver en Lanzarote que uno no sabe nunca por donde empezar.